Andreína Vies.- La falla en la distribución de gas doméstico perjudica a más de cuatro millones de familias, actualmente, se está dependiendo de la planta de fraccionamiento de José, la que a su vez es alimentada por las plantas de extracción San Joaquín, Santa Bárbara y Jusepín ubicadas al Oriente de Venezuela.
Antero Alvarado, socio principal de Gas Energy Latín América, un cilindro de 10 kilos de gas tiene una duración de dos semanas, tomando en cuenta que la población cocina tres veces al día, según detalles de Fedecámaras.
Se conoció que anteriormente existían dos fuentes para suministrar gas propano, una de ellas se obtenía en el Lago de Maracaibo, donde se conseguía el metano y propano, sin embargo, desde el año 2018 ya no realizan dichas extracciones en el occidente del país.
Alvarado resaltó que, “Prácticamente, tenemos un problema estructural. La caída de producción y los altos volúmenes de quema y venteo de gas en la zona de Monagas esté saliendo a la superficie y venga con menos contenido de riqueza de gas”.
En cuanto a la gasolina Alvarado destacó que, debido a las restricciones existentes para evitar brotes de Covid-19 se ha notado una disminución en el uso de carros particulares y privados, a la situación sanitaria se le suma la escasez y regulación de combustible.
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A juicio del socio principal de Gas Energy Latín América, existen tres aristas “favorables” referente a la situación con el combustible, la primera, se refiere a que la gasolina puede ser importada, tal como ha sucedido en los últimos meses cuando atracaron buques iraníes con despacho de barriles; la segunda, tiene que ver con que el país cuenta con refinerías que podrían activar y aumentar la producción; por último, los usuarios no pueden sustituir con ningún otro producto la gasolina.
