Angélica Álvarez.- Un fallecido en Cali durante manifestaciones convocadas en Colombia, en rechazo a un proyecto de reforma tributaria impulsado por el gobierno de Iván Duque.
Cali fue una de las ciudades donde se llevaron a cabo los hechos más violentos, hubo enfrentamientos y actos de vandalismo, por ello las autoridades decretaron toque de queda desde las 15 horas.
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«Los primeros reportes señalaban que seis almacenes de cadena, 12 cajeros, tres sucursales bancarias y tres buses fueron vandalizados. Además, indígenas Misak derribaron una estatua de Sebastián de Belalcázar, un conquistador español del siglo XVI».
Entre las propuestas que generaron más molestia son gravar los servicios básicos en zonas de clase media-alta, los funerales y crear un impuesto sobre la renta a las personas que ganen más de 656 dólares mensuales, mientras el salario mínimo es de 248 dólares.
«El gobierno no quiere escuchar a los ciudadanos, no quiere escuchar a los partidos políticos, no quiere escuchar a la academia sobre esa petición tan sentida de retirar la reforma que va a poner a aguantar hambre a más millones de colombianos”, dijo en Blu Radio Francisco Maltés, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). Las masivas manifestaciones, apoyadas por camioneros y taxistas, generaron bloqueos en algunas avenidas, así lo reseña DW.
