Venezuela vive una crisis política que se profundiza cada día. La Contraloría general de la república inhabilitó a Henrique Capriles para ejercer cargos públicos hasta mediados de la próxima década, por un caso de irregularidades administrativas en su gestión como gobernador del estado Miranda.
Henrique Capriles no podrá optar por cargos de representación pública hasta el año 2032, de acuerdo con la disposición de la contraloría. El ex candidato presidencial hizo el anuncio a través de su cuenta en la red social Twitter.
Capriles dijo que apelará la medida. No duda en afirmar que se trata de una retaliación política en su contra, pues es la figura política con mayores posibilidades de ganar la presidencia en unas eventuales elecciones en el 2018.
Representantes de la oposición han liderado numerosas marchas contra la sentencia del TSJ con la que le quita facultades legislativas a la Asamblea Nacional. En opinión de Capriles, se trata de un golpe de Estado propiciado desde el mismo gobierno nacional.
Abogados al servicio de Henrique Capriles interpondrán demandas ante instancias nacionales e internacionales para que se le permita su participación en las presidenciales del 2018. En la misma condición se encuentra Leopoldo López, dirigente de Voluntad Popular, preso en la cárcel de Ramo Verde.
Henrique Capriles rivalizaría con Nicolás Maduro por segunda vez. Ambos se midieron en abril del 2013, resultando favorecido el actual presidente por una diferencia de poco más de 200.000 votos.
Capriles está dispuesto a medirse con otros precandidatos de la Mesa de la Unidad Democrática en unas elecciones primarias. Otro partido que ya postuló a su abanderado es AD, con Henry Ramos Allup, ex presidente de la Asamblea Nacional.
Henri Falcón, gobernador del estado Lara y ex alcalde del municipio Iribarren, de Barquisimeto, también podría lanzarse a la presidencia de la república. Otro que ha manifestado su intención de postularse es Leopoldo López, pero su estadía en la cárcel se lo impide.
Encuestas diversas dicen que Henrique Capriles cuenta con el 50,3 por ciento de la intención de voto del electorado en los actuales momentos; López tiene 53 por ciento.
