Andreína Vies.- Este 21 de enero el actor y comediante venezolano Roberto Hernández, mejor conocido como “El Coconazo”, fue privado de libertar debido al estado de desnutrición en el que mantenía a varias de sus mascotas.
Hernández tenía a sus animales en la azotea de su apartamento, el cual está ubicado en la urbanización Maneiro en el estado Nueva Esparta.
Según medios de comunicación que indagaron en la noticia a través de los vecinos, los perros que se encontraban en condiciones precarias eran presuntamente utilizados para rituales santeros.
La denuncia contra Hernández fue emitida por los habitantes de su residencia, estos se dirigieron a grupos de protección animal, quienes se acercaron hasta el lugar para verificar el estado de los canes.
Las autoridades procedieron a su detención luego que el panorama de maltrato animal se comprobara.
Otros casos de maltrato animal
Durante el primer semestre del año 2020 fueron denunciados varios casos de violencia contra mascotas, en Guárico específicamente el 4 de marzo, se conoció que individuos le propinaron varias perforaciones a un can; En Bolívar, un hombre mató al perro de su hija al lanzarlo de un octavo piso; también en Bolívar un grupo de hombres mató a un mono luego de alcoholizarlo con anís; En Barinas, dos mujeres mutilaron a un canino, entre otros que fueron expuestos ante la Fiscalía General de la República.
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Ante estos escenarios el fiscal general Tarek William Saab, expresó, “Tomamos la iniciativa en todo el país de judicializar los casos, de penalizar, de dictar privativa de libertad a torturadores y asesinos de animales. No solamente domésticos, sino de la fauna silvestre. A partir de una serie de acciones que hemos hecho en contra de quienes mataron a un jaguar aparecieron otras denuncias del mismo tenor. Luego aparecieron denuncias contra personas que desollaron animales domésticos, perros o gatos; que los mataron, que los apuñalaron, torturaron. Dijimos entonces que teníamos una debilidad política, porque el maltrato animal es visto como una simple falta, cuando no es así: un animal doméstico o de fauna silvestre es un ser vivo”.
