El Huracán Florence, desde el mismo momento en que tocó tierra en la Costa Sureste de los Estados Unidos, no ha hecho sino ocasionar calamidades y dejar un lamentable saldo de víctimas mortales que, hasta el momento, asciende a los 18 fallecidos. El último de esos decesos fue el de un infante que no sobrevivió a la caída de un árbol sobre su hogar.
Según reportó el comisionado del Condado de Gaston, en Carolina del Norte, el bebé de apenas 3 meses no pudo superar las heridas sufridas cuando un pino se derrumbó sobre la casa móvil familiar en la tarde del domingo.
Esta es la segunda muerte de un niño pequeño a causa de Florence, después de que el viernes pasado falleciese otro cuando también un árbol cayó sobre su vivienda en Wilmington, ciudad cercana a donde el ojo de Florence tocó tierra como huracán de categoría 1 y vientos de 150 kilómetros por hora. La madre de este primer infante también pereció en el hecho.
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Más lluvias e inundaciones
Expertos del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos han advertido que el Huracán Florence seguirá provocando grandes precipitaciones en Carolina del Norte y el noroeste de Carolina del Sur y Virginia Occidental, complicando la situación de varios ríos de la región que amenazan con desbordarse y poner de nuevo peligro a los residentes en la zona.
Trump declara estado de emergencia
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró estado de emergencia en Carolina del Sur por la devastación que dejó el paso del Huracán Florence, y ha autorizado al Departamento de Seguridad Nacional y a la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias a coordinar todos los esfuerzos de socorro, así como a destinar fondos federales para afrontar la tragedia.
