Nelson Gimón.- La pandemia del coronavirus fue la total y absoluta protagonista de este año que termina, pues afectó al planeta en prácticamente todos los ámbitos y modificó la forma en que las cosas se hacen. Las entregas de premios, por ejemplo, sufrieron en carne propia las consecuencias de estas circunstancias y se tuvieron que adaptar a una nueva realidad y a unas nuevas normas.
Así las cosas, las más grandes premiaciones del cine y de la música evolucionaron. La meta del año en general para este tipo de eventos fue no quedarse parados y no hacer nada, sino, por el contrario, buscar la forma de seguir entreteniendo a pesar de la crisis. ¿La solución? Eventos sin público, muchos de ellos prácticamente virtuales, y con fácil acceso para todos desde casa.
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Los que se salvaron
Los Premios Oscar, los Globos de Oro y los BAFTAs, tres de los eventos más importantes de la industria del cine, se montaron de acuerdo al plan pues se llevaron a cabo durante los primeros dos meses del año. En estas ceremonias triunfaron en grande películas como la surcoreana ‘Parasite’, la británica ‘1917’ o la estadounidense ‘Once Upon a Time in Hollywood’.
En cuanto a música, los Premios Grammy también se realizaron sin contratiempos (finales de enero). Allí la gran ganadora fue Billie Eilish, quien se llevó 5 estatuillas, incluyendo las cuatro categorías principales: Grabación del Año, Álbum del Año, Canción del Año y Mejor Nuevo Artista.
Los que evolucionaron
A partir de marzo se comenzaron a suspender premiaciones a diestra y siniestra, aunque hubo algunos eventos que supieron evolucionar y adaptarse. Buen ejemplo de esto fueron los Premios Juventud, que en agosto montaron una entrega con medidas de seguridad extremas, alfombra roja limitada, sin público presente, y con los pocos artistas que dijeron presente haciéndolo porque eran los únicos que iban a cantar. Bad Bunny fue el mayor ganador acá.
Dieron cátedra también (siguiendo todos los protocolos establecidos) los MTV VMAs, los cuales montaron una gran producción en Nueva York a finales de agosto, con numerosas y espectaculares presentaciones en vivo en variadas locaciones.
Otro excelente ejemplo de adaptación lo dieron los Emmy, que premian lo mejor de la TV en Estados Unidos. Este evento se hizo de forma virtual en septiembre, con una gran puesta en escena con múltiples pantallas y conexiones vía digital con todos los nominados (ataviados para la ocasión vía Zoom). Acá arrasó la miniserie ‘Watchmen’ (HBO) con 11 estatuillas.
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En octubre se realizaron las entregas de los Billboard Awards y los Billboard Latinos. En el primero el gran ganador fue el rapero Post Malone, mientras que en el segundo fueron Bad Buny y Daddy Yankee. Estos eventos fueron semi-presenciales, solo con los cantantes que participaron en los segmentos musicales y mayores nominados (el resto de artistas ‘asistió’ de forma virtual).
Ya en noviembre se dieron los Grammy Latinos, en una ceremonia en la que destacaron artistas como J Balvin o Natalia Lafourcade, y que siguió las restricciones de la pandemia y los parámetros de los dos Billboards.
Otras galas que se efectuaron en 2020 fueron los American Music Awards (The Weeknd y Taylor Swift dominaron acá) y los People’s Choice Awards, ambas siguiendo las mismas medidas que sus antecesoras y marcando definitivamente el establecimiento de una nueva normalidad.
(Con información de Diario Libre)
