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Gartner, una empresa de análisis, demostró que Samsung ha vendido más de ochenta millones de teléfonos inteligentes a lo largo del primer trimestre del año, mientras que Apple consiguió la venta de sesenta millones de unidades.
La empresa surcoreana sigue dominando el mercado, pero experimentó un retroceso con respecto a la marca de la manzana, quien impulsó sus ventas, en buena parte gracias al éxito de sus dispositivos en China.
El Galaxy S6 ha dado muy buenos resultados en el mercado, pero todo parece indicar que el negocio de los teléfonos inteligentes comienza a resentirse. En lo que va del 2015 los porcentajes de demanda de este dispositivo han caído a más de la mitad de la cifra sumada el año pasado.
Hay muchos síntomas que indican que la desaceleración es inminente e irreversible, pero las empresas tienen fe en que otros rubros de la población se fortalezcan, dando un nuevo impulso a este tipo de artefactos, que juegan en la actualidad un papel fundamental dentro del día a día de las personas.
