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Si hay un caso que viene dando de qué hablar desde el año pasado ese es el del portero Íker Casillas. El capitán del Real Madrid ha venido dando tropiezos en su impecable carrera desde la época Mourinho y, aunque muchos creyeron que estaba sentenciado por la presencia de Diego López en el club blanco el año pasado, la leyenda madridista perduró, aunque sin sorpresas en el campeonato que acaba de cerrar.
Ahora la situación de Íker Casillas describe un escenario muy parecido al del verano del 2014, con la única salvedad de que Florentino Pérez ha sido tajante con el mostoleño: con la llegada de David De Gea, no hay ninguna titularidad que defender. La Roma ha contactado directamente al representante de Casillas para saber cuál es la decisión del español, pero el guardametas desea esperar a que el fichaje del portero del Manchester United se concrete.
La Roma está dispuesta a pagar al portero tres millones de euros por campeonato y el Real Madrid completará el sueldo al que aspiraba Íker de seguir en el conjunto blanco las dos temporadas que le quedaban. Así pues, el club merengue pondría 3,5 millones de euros el primer año que el mostoleño juegue en la liga italiana y 3 millones durante el segundo.
El Arsenal era un conjunto que seducía enormemente a Íker Casillas, pero con la llegada de Petr Cech a las filas de los gunners, la ilusión de conseguir ese fichaje se ha esfumado. Podría entrar a la Premier League de la mano del Tottenham, pero aún está por verse la salida de Hugo Lloris. El tiempo corre y las opciones se estrechan para un portero que dio todo al Real Madrid.
