Quienes tienen problemas de digestión pueden asegurar con pruebas en la mano que consumir los llamados ‘alimentos germinados’ es toda una solución altamente nutritiva y, sobre todo, digerible. Ahora bien ¿de qué van este tipo de alimentos? María Eugenia Baptista Zacarías nos lo explica en una nota de su portal web oficial.
Los ‘alimentos germinados’ son alimentos vivos (semillas, granos, leguminosas, etcétera) que están pasando por el proceso de germinación, usualmente tienen raíces y hojas visibles, y están cargados de altísimas dosis de nutrientes y enzimas (más que cualquier otro tipo de alimentos).
Son, además, alimentos que poseen la gran ventaja de ser sumamente versátiles, y que pueden ser preparados fácilmente desde casa (siempre y cuando se cuente con las condiciones adecuadas para que las semillas puedan brotar, claro está).
Por si eso fuera poco, los ‘alimentos germinados’ contienen altas cantidades de vitamina C y betacaroteno (elementos vitales cuando se habla de salud celular), minerales varios como el magnesio (el cual mantiene un perfecto equilibrio corporal), y demás componentes sumamente beneficiosos para el organismo humano.
María Eugenia Baptista Zacarías complementa su nota sobre los ‘alimentos germinados’ con un pequeño extracto del portal Esmeralda Azul en el cual se asegura que “su contenido vitamínico y mineral, y la biodisponibilidad de algunos de esos nutrientes, puede aumentar entre 200 a 600%. Ocurre también un aumento de la cantidad de proteínas y el valor biológico de estas”.
Y cierra la cita con la siguiente información: “Con la germinación ocurre también la degradación de diferentes constituyentes del grano/semilla, volviéndolo mucho más fácil de digerir”, lo cual (lo dicho) termina de corroborar lo dicho al principio sobre estos alimentos y su función para con los problemas digestivos.
