Aliarly Carrillo.- La activista de derechos humanos en Venezuela, Tamara Suju, denunció que los funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), no dejaron pasar alimentos de los familiares a los “presos políticos” que están retenidos en la sede de Boleíta, Caracas.
La información la suministró en la red social Twitter, en la que mencionó que los funcionarios impidieron que los detenidos recibieran alimentos y agua potable de sus familiares.
El hecho ocurrió este lunes, cuando unos 80 familiares de presos políticos estaban en las adyacencias de la sede de la DGCIM, en Boleíta.
“No les permiten dejar las cosas. Muchos han venido de muy lejos, incluso a pie para poder estar ahí. Desconocen cómo se encuentran los presos políticos”, acotó.
Al menos 70 personas han sido detenidas por fuerzas de seguridad del Estado por razones políticas dentro del período de la cuarentena por el COVID-19, desde el 17 de marzo hasta el 23 de abril. Así lo señalan datos recopilados por la ONG Foro Penal Venezolano.
“Los presos políticos están en un estado de total vulnerabilidad. Están en lugares sucios donde la comida es deficiente, no hay medicinas ni agua. No les dan implementos de limpieza ni de aseo personal”, advirtió la activista Ana María Da Costa, hermana del preso Vasco Da Costa.
Con información de El Nacional
