Adriana Celedón.- El cantante Pablo Alborán abrió la cuarta noche del Festival Viña del Mar y volvió a enamorar al público de la Quinta Vergara al ritmo de sus éxitos más románticos.
Alborán abrió el espectáculo con su tema No vaya a ser, de su último álbum Prometo (2017), y a partir de ahí siguió con otros favoritos de los fans como Saturno, acompañada con una marea de globos blancos por parte del público, o la más movida Tabú, en la que exhibió su movimiento de caderas a las 15.000 personas presentes en la Quinta Vergara.
Otros de los temas que incluyó en su repertorio fueron Pasos de cero y La escalera, Dónde está el amor, Quién, con coros del público en solitario en la parte final; Tanto y Te echado de menos, con la guitarra en mano.
Durante toda la noche, Alborán agradeció al público chileno su cariño y su apoyo durante todos estos años. “Desde que vine a Viña la primera vez hicieron que mi carrera pegara un salto, que se abrieran las puertas de muchísimos lugares. Viña y Chile son responsables de que yo sea feliz”, dijo el malagueño.