Andreína Vies.- Este martes durante las nuevas revueltas ocurridas en Colombia fue incendiado el Palacio de Justicia de la ciudad de Tuluá, ubicado en el departamento del Valle del Cauca, según los informes el techo de dicha institución ha sido consumido por las llamas.
El ministro de Justicia colombiano, Wilson Ruiz, condenó las acciones violentas expresando “Ataques como los de esta noche (25 de mayo) en Tuluá dejan de ser vandálicos y se convierten en actos terroristas. La protesta pacífica es legítima, la violencia es delito”.
En otros detalles ofrecidos por las autoridades se conoció que los bomberos enfrentaron dificultad para llegar hasta el lugar del siniestro debido a la situación hostil que se desarrolló y por la presencia de grupos que se encontraban en las inmediaciones del palacio.
Los enfrentamientos se produjeron entre los cuerpos de seguridad y ciudadanos protestantes. Hasta la fecha se han registrado 43 muertos desde que inició el conflicto el pasado 28 de abril. La ciudad de Cali y la región del Valle del Cauca han sido epicentro de estos escenarios.
Los actos vandálicos como saqueos, violencia y destrucción han sido mayores desde que estalló el descontento social, esta situación ha sido denunciada, así como el uso excesivo de fuerza por parte de los cuerpos de seguridad.
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Este lunes fueron registradas cuatro nuevas bajas de civiles, dos de estas víctimas habían sido reportadas como desaparecidas desde el pasado domingo, según indicó el Instituto de Estudios para la Paz (Indepaz).
