Corea del Norte acusó el lunes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de «declarar la guerra» a ese país al enviar bombarderos cerca de sus costas, una afirmación que la Casa Blanca calificó de «absurda».
En una demostración de fuerza, Estados Unidos envió el sábado a bombarderos estratégicos a sobrevolar cerca de la costa de Corea del Norte, agregando presión militar a la tensión política de toda la semana, exacerbada a través de insultos y amenazas.
«Todos los Estados miembro (de la ONU) y el mundo entero deberían recordar claramente que fue Estados Unidos el primero en declarar la guerra a nuestro país», dijo el lunes el jefe de la diplomacia norcoreana, Ri Yong Ho, a periodistas en Nueva York.
En rueda de prensa, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, no tardó en responder: «No hemos declarado la guerra a Corea del Norte y francamente la sugerencia es absurda», dijo, recordando que las operaciones militares estadounidenses fueron en espacio aéreo y aguas internacionales.
Seúl, en tanto, urgió a Washington a «evitar una mayor escalada de las tensiones». «Es muy probable que Corea del Norte haga otras provocaciones», dijo la ministra de Exteriores surcoreana, Kang Kyung-wha, en un discurso en Washington.