Andreína Vies.- “Los puros números muestran claramente que la población de Bielorrusia quiere un cambio y lo quieren ya. La UE les respalda”, sentenció este lunes el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell mediante un comunicado conjunto donde rechazan entre otras cosas las acciones opresoras contra los manifestantes.
Entre las líneas de la misiva, se destaca que las movilizaciones registradas este domingo contaron con una multitud significativa “en la historia moderna de Bielorrusia”, con la cual buscan lograr un cambio en la política, ya que el pasado 9 de agosto el presidente Alexander Lukashenko fue reelegido para cursar su sexto año en el poder.
Los resultados comiciales que la oposición bielorrusa y países del bloque europeo han catalogado como “fraudulentas” desataron una ola de manifestaciones, ante este hecho Borrell resaltó que los ciudadanos “Tienen demandas claras: la puesta en libertad de los detenidos arbitrariamente, la persecución de los responsables de la brutalidad policial y la celebración de nuevas elecciones”
Borrell en representación del grupo de los 27 exigió una investigación profunda sobre el “tratamiento inhumano” que les han propinado a los protestantes dentro de los centros de detención y, que los responsables de esto paguen por las arbitrariedades cometidas contra los bielorrusos.
El pasado viernes 14 de agosto los ministros de exteriores de la Unión Europea sostuvieron una reunión extraordinaria, donde decidieron diseñar restricciones individuales para quienes han participado en el “fraude electoral” y las represiones.
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Nuevo encuentro de la UE
Para este miércoles 19 de agosto los líderes de la UE volverán a reunirse mediante videoconferencia para dar continuidad a la situación política y social que atraviesa Bielorrusia, dicho encuentro fue propiciado por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
En principio Polonia y los países bálticos propuso que el bloque funcionara como mediador en este conflicto, que hasta este domingo deja dos personas muertas, 7.000 detenidos y cientos de heridos.
