En Venezuela muchas personas que no disponen de un vehículo, tienen que recurrir a los improvisados autobuses, llamados perreras para trasladarse a sus sitios de trabajo y para regresar a sus hogares.
La situación ocurre en diversas regiones de país. En horas de la mañana y de la tarde cientos de personas se desesperan por subir a un destartalado camión de carga habilitado como autobús, reseñó lapatilla.com.
Los autobuses han sido reemplazados con camiones de carga, que están siendo utilizados para llevar pasajeros, en general a los más pobres. Los transportistas ya no consiguen o no pueden cubrir el costo de llantas, aceite de motor, baterías u otros repuestos.
Unos 280 mil autobuses, dejaron de circular en el país, afirmaron dirigentes sindicales. Sólo quedan unas 30 mil unidades, es decir un 10 por ciento del transporte, dijeron a Reuters.