Andreína Vies.- La noche de este lunes 14 de diciembre se iluminó con el encendido de velas y la cadena de oraciones que los pobladores de Güiria, en el estado Sucre, realizaron para rendir homenaje a la memoria de los venezolanos fallecidos en la tragedia sucedida el pasado 6 de diciembre cerca de estas costas.
La Iglesia Inmaculada Concepción en Güiria fue el escenario donde se concentraron los residentes, quienes realizaron una plegaria por los connacionales que aún no han sido hallados durante la misa exequial oficiada por Monseñor Jaime Villarroel, obispo de la Diócesis de Carúpano.
Luego de la santa ceremonia, salió la procesión hacia el muelle donde fueron encontradas las 21 víctimas del naufragio de dos barcas que se dirigían hacia la isla de Trinidad y Tobago. La tarde de este lunes también comenzó la entrega de los cuerpos, informó el director de Cáritas Carúpano y párroco de la Divina Misericordia, Jesús Villarroel.
En el infortunio murieron tres niños y hay una cantidad desconocida de desaparecidos. Referente a este caso el fiscal general del gobierno izquierdista, Tarek William Saab, dio a conocer que el dueño del bote “mis recuerdos” donde realizaban la travesía los venezolanos que perecieron en alta mar responde al nombre de Luis Alí Martínez, quien fue puesto a la orden de la justicia.
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La situación con respecto a los migrantes también causó la reacción de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) que mediante un comunicado exhortó a los gobiernos de Venezuela y Trinidad y Tobago a velar por la integridad y derechos humanos de las personas que salen del país suramericano en busca de otras oportunidades, del mismo modo, apelaron al artículo 22 de la Convención sobre los Derechos del Niño, donde se resalta que se respeten los principios de no devolución y reencuentro familiar.
