En una sociedad cada día más globalizada, el usuario está saturado de información banal que los aliena de muchas realidades
La conexión entre la piscología y la comunicación es primordial: debemos comunicarnos para poder establecer relaciones sociales y profesionales. Por eso, adentrarse en la comprensión de este vínculo también debemos tratar las relaciones humanas, sociales e intrapersonales.
El psicólogo Danilo Díazgranados comenta que se deben explorar algunos de los conceptos más importantes de esta conexión para entender la forma en que las personas se comunican y establecen lazos a través de las palabras, las ideas y los conceptos.
- La comunicación interna. Se refiere al pleno conocimiento de lo que se quiere transmitir, así como también sómo se interpreta lo que otros dicen y como ambas cosas afectan a un individuo. Es vital entender que todo lo que se comunica tiene una carga de sentimientos, ideas y que genera una serie de reacciones.
- La tecnología y las masas. El mundo avanza más rápido de lo que podemos procesar, y en la internet abundan las noticias falsas, cargadas de comentarios hirientes y noticias sin trascendencia que sólo apuntan a reducir la importancia de todo lo que no sea entretenimiento.
- Ruptura con los medios masivos. Cada día son más las personas que buscan alternativas para mantenerse debidamente informados y nutridos en temas personales, ante un mundo cada día más globalizado y digital determinado a mantener a la población distraida con temas banales y carentes de importancia real.
La psicología se ve fuertemente afectada por las prácticas comunicativas. A partir de los rasgos mentales y comunicacionales se forma la personalidad, y estos rasgos están fuertemente influenciados por programas de televisión y tendencias de información en las redes sociales.
Es importante analizar con detalle a los diversos canales de comunicación a nuestro alcance, buscando fuentes de información confiables para romper con el patrón general en el que hay un emisor y millones de receptores que no hacen una debida evaluación de lo que se les dice.
Solo a partir de esos puntos podremos trabajar para obtener una sociedad mejor, más seria y crítica en la cotidianidad.