Jannik Sinner empezó tropezando en el Abierto de Estados Unidos, cediendo el primer set que jugó tras haber sido exonerado en un caso de dopaje que nadie sabía hasta unos cuantos días previo al inicio de la actividad en Flushing Meadows.
El italiano barrió 6-3, 6-4, 7-5 a Taylor Fritz con su típico tenaz juego desde el fondo de la cancha para coronarse el domingo campeón masculino del Abierto de Estados Unidos, apenas tres semanas después de que trascendiera que dio positivo en dos controles antidopaje.
Sinner conquistó el segundo trofeo de Grand Slam de su naciente carrera — el otro fue en el Abierto de Australia en enero — y frustró el intento de Fritz (12do cabeza de serie) de poner fin a la sequía sin títulos en los majores de los varones estadounidenses que lleva 21 años.
La consagración de Andy Roddick en Flushing Meadows en 2003 fue el último título en un Slam por parte de un hombre de Estados Unidos. Y el último previo a Fritz, de 26 años, en alcanzar la final de uno de los cuatro grandes del tenis, también fue Roddick, quien perdió ante Roger Federer en el Wimbledon de 2009.
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De todas formas, este torneo fue un éxito en muchas maneras para el tenis de Estados Unidos, con dos mujeres y dos hombres del país en las semifinales de un grande por primera vez desde el US Open de 2023. Jessica Pegula alcanzó la final ante de perder el sábado ante la bielorrusa Aryna Sabalenka.
AP
