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En las nuevas eras comunicacionales las plataformas de mensajería de texto se han convertido en una de las principales fuentes de malentendidos entre las parejas. Expertos en la materia aseguran que herramientas como WhatsApp, Line o Telegram pueden ser causa de discusiones por la ausencia del uso de signos de puntuación, la falta de intención en el mensaje y las libres interpretaciones.
Psicólogos aseguran que las parejas no deben refugiarse en los servicios de mensajería instantánea para resolver o abordar a través de ellos las situaciones importantes. A veces decir las cosas a la cara se hace difícil, razón por la que escudarse en un mensaje de texto puede ahorrarnos la angustia de experimentar la reacción del otro, pero esto no es saludable.
El doble check azul de WhatsApp, quizá uno de sus aportes más odiosos en materia de nuevas herramientas, es un motivo de polémica y discordia igual o parecido a las siglas de D y R en el BB Messenger, en la época en la que la plataforma de BlackBerry gozaba de una enorme popularidad. Expertos aseguran que un mensaje visto no necesariamente requiere respuesta, así que es absurdo iniciar una discusión por esto.
Uno de los últimos aspectos a considerar es la verdadera esencia y utilidad de las plataformas de mensajería. Su fin es comunicacional y no de entretenimiento, así que no es razonable que personas se aislen de su entorno social para atender a sus contactos más que a sus familiares y amigos a lo largo de una velada.
