Nelson Gimón.- Joe Biden, presidente de Estados Unidos (EEUU), encabezó este jueves un evento en la Casa Blanca en el que dijo que la violencia armada en el país es una vergüenza internacional que tiene que acabar, aprovechando además para anunciar una batería de medidas para abordar el incremento de estos episodios.
“La violencia armada en este país es una epidemia”, espetó el mandatario a una audiencia de personas afectadas por este flagelo, y especificó que las acciones ejecutivas que ha puesto en marcha (las cuales, por cierto, no afectan al derecho de portar armas estipulado en la Segunda Enmienda de la Constitución de EEUU) incluyen medidas para restringir las llamadas ‘armas fantasma’ (armas artesanales que pueden construirse usando piezas e instrucciones fácilmente asequibles online).
Asimismo, informó que ha ordenado al Departamento de Justicia que prepare leyes para los estados que permitan el retiro de temporal de armas de fuego a personas consideradas en alto riesgo de lastimarse a sí mismas o a otras personas.
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Además, Biden anunció la solicitud de un informe completo sobre el tráfico de armas de fuego, pidió más inversión en programas de intervención en comunidades propensas a la violencia, y reveló que nominará al defensor del control de armas David Chapman para dirigir la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.
Los anuncios de este jueves, dijo el presidente estadounidense, fueron apenas los primeros pasos emprendidos por su administración para abordar la violencia armada. ¿Cuáles serán los siguientes? Se espera una prohibición de las armas de asalto, o la implantación de un sistema de verificación de antecedentes para adquirir armas de fuego. “Tenemos un largo camino que recorrer”, admitió.
(Con información de Notimérica)
