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El gran capitán, como se conoce en el vestuario al jugador Navarro, ha protagonizado en el palco de honor del Vicente Calderón una emotiva despedida, al decir adiós al Atlético de Madrid para sumarse a las filas del Athletic de Bilbao.Raúl García se mostró agradecido y complacido por el apoyo de la plantilla y de su familia.
Enrique Cerezo, el presidente del equipo colchonero, ratificó el orgullo que significa para el club haber tenido a García vistiendo la camiseta rojiblanca durante ocho temporadas y lo felicitó por haber conseguido siete títulos con el club del Calderón, aupándolo en su nuevo destino en Bilbao.
La competitividad de Raúl García es la que lo empuja a las filas del Athletic, ya que reconoció ante la prensa y los jugadores asistentes, que aspira tener más oportunidades sobre la cancha y que no puede rechazar la oferta que el equipo vasco ha puesto en su camino dentro de La Liga española.
Entre los jugadores del Atlético que acudieron al estadio para acompañar al futbolista en su despedida, que terminó con lágrimas y nostalgia, estaban Moyá, Koke, Tiago Filipe Luis y Gámez. El de Navarra reconoció que no esperaba tanta solidaridad, en un mundo en el que el ego juega en contra la mayor parte de las veces.
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