La Corte Internacional de Justicia (CIJ), cuya sede principal se encuentra en la ciudad holandesa de La Haya, convocó a los gobiernos de Guyana y Venezuela para que presenten alegaciones por escrito para justificar su posición sobre si su disputa fronteriza por la región del Esequibo recae bajo la jurisdicción de esta institución.
El ente le ha dado a Guyana la fecha límite del 19 de noviembre para presentar su memoria, mientras que a Venezuela le ha dado hasta el 18 de abril de 2019 en forma de contramemoria. Esta determinación del tribunal se toma después de que delegaciones de ambos países tuvieran un encuentro el pasado 18 de junio con su presidente, Abdulqawi Ahmed Yusuf.
Para entonces, Venezuela defendió que la CIJ carece de jurisdicción y, mediante una carta firmada por el Presidente Nicolás Maduro, dejó constancia de que el país no participaría en los procedimientos. Guyana, por su parte, alegó que la institución debe tomar el caso después de que el Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, recomendara a principios de año que La Haya resolviera la histórica disputa.
El gobierno de Georgetown pidió en ese momento al tribunal tener diez meses para entregar su memoria, algo que la CIJ le ha negado al darle solo cinco, los mismos que tendrá Venezuela para responder… si es que lo hace.
Si Venezuela no presenta su contramemoria, la CIJ igualmente decidirá si el órgano judicial tiene o no jurisdicción para resolver la vieja controversia territorial entre estas dos naciones sudamericanas.
