Costa Allegra, crucero averiado de la compañía Costa Crociere, la misma del Costa Concordia, llegó remolcado a las costas de las islas Seychelles, después de pasar tres días en el mar sin electricidad y sin alimentos frescos.
Sus casi mil pasajeros tuvieron que dormir en cubierta por el calor y la oscuridad, luego de que un incendio en la sala de máquinas paralizara los motores y provocara una falla que dejaría sin electricidad a todo el barco.
No hubo víctimas mortales en el incidente.