No es la primera red social que tropieza en los últimos meses. Hace algunas semanas atrás, las críticas bombardearon Twitter por sus supuestos ajustes, en aras de aumentar su número de usuarios activos y motivar a los internautas a sumarse a la red. Jack Dorsey y su equipo querían prescindir del orden cronológico en los timelines.
Desde luego esto causó un enorme revuelo en los usuarios, puesto que una medida como esta rompería con el esquema de horizontalidad que siempre ha manejado esta plataforma, favoreciendo a las cuentas más influyentes y, en especial, a las marcas, celebridades y empresas.
Hace pocos días ocurrió algo muy similar con Instagram. La conocida plataforma de imágenes que maneja Facebook anunció que en su próxima actualización se harían ajustes en sus algoritmos para que los usuarios vieran en su línea de publicaciones recientes aquellas cuentas con las que sostenían mayor interacción.
Debido a que Instagram es un aliado enorme de las marcas y celebridades, muchas cuentas certificadas iniciaron una agresiva campaña instando a los usuarios a que activaran sus perfiles en sus notificaciones, con el fin de no perderse de nada.
No obstante, la desesperada actitud de las marcas y la queja de miles de usuarios hizo que los directivos de Instagram recapacitaran y el pasado 28 de marzo compartieron en su cuenta de Twitter un anuncio, en el que echaban por tierra los cambios anunciados.
En su momento Jack Dorsey también desistió de la idea, una medida que acercaba más a la red de microblogging al formato de interacción de Facebook.
