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Parece que aún no estamos listos para alcanzar el sueño tecnológico de Back to the Future II, en el que Marty McFly era capaz de deslizarse por las calles sobre una patineta antigravitacional. La carrera por equiparar la tecnología del 2015 que se describía en el film protagonizado por Michael J. Fox con los verdaderos avances del año que acaba de finalizar, parecía resuelta con la llegada de la Hoverboard de Lexus, pero de nuevo las cosas se complican.
El exclusivo artefacto de Lexus tiene cientos de limitaciones, y no es tan sencillo de usar como se cree, pues sólo posee la capacidad de flotar en superficies elaboradas con determinado material que favorece al campo magnético que le permite mantenerse en el aire, lejos del contacto con el suelo.
El Hoverboard que se puso tan de moda las pasadas navidades, realmente no flota, pero parecía una versión más que aceptable de esta patineta, con la capacidad de trasladarse automáticamente, gracias a la presencia de una batería de litio. Hasta aquí todo parece muy bien de no ser por un grave problema: estos artefactos se incendian con suma facilidad.
En vista de su enorme peligrosidad por la combustión espontánea que más de uno de estos dispositivos ha sufrido en los últimos meses, aerolíneas y universidades optaron por vetar los Hoverboards, considerándolos una amenaza latente. Sólo en Estados Unidos, alrededor de veinte universidades ha pedido explícitamente a los estudiantes que dejen estos objetos en casa, ya que incluso en los dormitorios pueden ocasionar accidentes.
Entre las universidades norteamericanas que han vetado el uso del Hoverboard en sus campus, tenemos:
- Boston University
- George Washington University
- University of Illinois
- Kean University
- Boston College
- University of South Carolina
