Cajeros automáticos de numerosas instituciones de la banca pública y privada colapsan todos los días, especialmente los fines de semana. La inflación acaba con el dinero en efectivo en Venezuela, pues cada vez más se requiere una mayor cantidad de billetes para pagar por un producto o servicio, sin importar que sea o no de primera necesidad.
BCV, el Banco Central de Venezuela, debe imprimir más billetes a través de la Casa de la Moneda, ubicada en Maracay. Los analistas del sector consideran de vital importancia contar con billetes de mayor denominación, pues el de 100 bolívares se quedó corto ante el notable incremento del costo de la vida.
BCV debe imprimir más billetes
Diputados de la Asamblea Nacional pertenecientes a la Mesa de la Unidad Democrática han recomendado al Banco Central de Venezuela la impresión de billetes de 200, 500 y 1.000 bolívares fuertes, sin embargo, algunos abogan por billetes de hasta 5.000 bolívares fuertes, que en realidad representan 5 millones de bolívares bajo el esquema anterior.
Rodrigo Cabezas, exministro de Finanzas, impulsó en el 2008 el proceso de reconversión monetaria que le quitó tres ceros al bolívar. Desde entonces se simplificaron numerosas operaciones, pero se acusó al gobierno nacional de querer ocultar la inflación con esta estrategia.
Personas que deben acudir a los bancos en busca de efectivo deben acudir a su institución de confianza con un bolso grande, pues los cajeros son capaces de entregarles millones de bolívares en billetes de 50, 20, 10 y hasta 5 bolívares, si fuera necesario.
Comercios diversos están estableciendo una estrategia de avance de efectivo ante el colapso de los cajeros automáticos. En muchas de estas empresas cobran una comisión de hasta 10 por ciento, que se queda corta en relación con las comisiones que recientemente fueron aprobadas por el Banco Central de Venezuela para el retiro de dinero en la calle.
