El Consejo Nacional Electoral (CNE) concluyó el proceso de auditoría al que fueron sometidas las máquinas que serán utilizadas durante la recolección del 20% de las firmas necesarias para activar el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, según reseña el portal de Globovisión.
La auditoría de los equipos se llevó a cabo en la sede del organismo electoral, de acuerdo a lo contemplado en el cronograma de actividades que fue aprobado por ese poder. Tanto los técnicos del CNE como representante de los diversos partidos políticos, fueron los encargados de revisar las aplicaciones que serán cargadas en las máquinas y de que se generaran los precintos de seguridad electrónicos.
Las partes también revisaron los códigos fuente correspondientes a las funcionalidades del sistema para el registro de datos biográficos, biométricos, el proceso de transmisión, entre otros. El acta fue firmada por representantes tanto del Partido Socialista Unidos de Venezuela (Psuv), como del Partido Comunista (PCV), Patria Para Todos (PPT) y la Mesa de Unidad Democrática (MUD).
A propósito del mecanismo constitucional, Julio Borges, jefe de la fracción parlamentaria por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), expresó que el presidente de la República «está fuera de la Constitución» debido a las acciones ejecutadas por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
«El derecho al voto no es del CNE, ni del TSJ, sino del pueblo, y lo haremos valer para resolver esta crisis, por eso con este Acuerdo estamos pidiendo que se cumpla y se respete la Constitución” aseguró Borges.
Borges comentó que los diputados defenderán el derecho al voto de todos los venezolanos, que «el Gobierno quiere aniquilar», mediante las instituciones del Estado persiguen impedir la manifestación de los ciudadanos.
También afirmó que en el país no existen garantías sobre el “ejercicio de la libertad de expresión y que no habrá democracia mientras hayan presos políticos.
