Venezuela está a la espera de que se habilite la vía electoral para decidir el destino del presidente Nicolás Maduro. Entretanto el CNE, el Consejo Nacional Electoral, muestra sus desacuerdos internos en relación con el referendo revocatorio.
Líderes de la oposición han propuesto marchas hasta el organismo electoral y entes judiciales para presionar por la realización de la consulta popular. El referendo puede realizarse en el 2016 según Luis Emilio Rondón, rector principal del CNE.
Rectoras del CNE como Socorro Hernández y la presidenta, Tibisay Lucena, afirman que aún es muy pronto para vislumbrar que el proceso consultivo se realizará antes que culmine el año en curso. Todo parece indicar que el referendo se realizaría en el 2017, y de ser así, el presidente Nicolás Maduro deberá entregar el poder al vicepresidente de turno en caso de que la mayoría de la población apruebe su salida.
Rondón afirma que los lapsos dan para que la consulta se realice a más tardar el venidero mes de octubre, previa revisión de las firmas que avalan el proceso. Henrique Capriles denuncia que las rectoras del CNE intentan colocarle obstáculos al proceso, con la idea de que no se realice al menos este año para favorecer de alguna manera u otra al gobierno.
Voceros de la oposición afirmaron recientemente que mantendrán las protestas de calle debido a que la directiva del Consejo Nacional Electoral ha postergado ya en varias oportunidades la reunión en la que se definiría el cronograma electoral de cara a un posible referendo revocatorio presidencial este mismo año. Como se sabe, un tribunal de Caracas impidió la realización de manifestaciones públicas en las inmediaciones del ente comicial.
Nicolás Maduro apoya la tesis de que el referendo no se realizará, o al menos este año. Diversos líderes oficialistas opinan lo mismo, como el vicepresidente Aristóbulo Istúriz o el alcalde de Caracas, Jorge Rodríguez.
